miércoles, 1 de agosto de 2007

La separación del fútbol local y la Selección

El viernes arranca un nuevo torneo argentino y resulta difícil imaginarse muchos jugadores de del fútbol local vistiendo la camiseta de la Selección en la primera fecha de la eliminatorias en octubre (Argentina jugará el 22 de agosto contra Noruega en Oslo sólo con jugadores que están en Europa).
La intención de Alfio Basile de armar un combinado local sonó bien a principios de año, pero con la práctica y el tiempo quedó demostrado su poco utilidad. La mayoría de los jugadores que se entrenaban tres veces por semana en el predio de la AFA en Ezeiza bajaron notablemente su nivel, salvo excepciones como las de Cristian Ledesma, Ezequiel Lavezzi, Daniel Díaz, Juan Pablo Carrizo o José Sosa, que mantuvieron o mejoraron sus actuaciones. Lamentablemente, ésto último trajo como consecuencia que los cinco emigraron al fútbol europeo.
Además, de los convocados a entrenarse solamente tres estuvieron en la Copa América: el Cata Díaz, Rodrigo Palacio y Hugo Ibarra. Debido a los partidos de Copa Libertadores, torneo en el cual llegaron a la final y ganaron, ninguno de los tres asistieron a muchos entrenamientos con la Selección. Además, en Venezuela sólo jugaron partidos o minutos de relleno.
La luz de esperanza del fútbol local puede nacer por izquierda, el mayor déficit de los jugadores argentinos. En la Copa América quedó evidenciada la poca proyección que tiene la Selección por ese sector. Ni Gabriel Heinze ni Esteban Cambiasso son jugadores con características para abrir la cancha ni para llegar hasta el fondo de la misma. Si a ésto se le agrega que Lionel Messi, el único atacante zurdo, prefiere volcarse por derecha, la izquierda quedó sin utilizarse.
En el fútbol europeo hay jugadores ofensivos que puedan jugar de volante por izquierda, pero la mayoría de éstos son diestros: Maxi Rodríguez (el máximo candidato a ocupar el puesto), Jonas Gutierrez (fue convocado en varias ocasiones por Basile), José Sosa (generalmente la primer temporada en un club nuevo no resulta fácil) y Luis González (en su club suele jugar por el centro). Los zurdos son: Julio Arca (campeón mundial juvenil en 2001, pero nunca fue tenido en cuenta por un entrenador de la mayor) y Sebastián Leto (jugará en un país, una liga y un equipo que le son nuevos, difícilmente pueda mostrar su mejor forma).
A la hora de mencionar defensores laterales por izquieda la lista se empobrece. Juan Pablo Sorín, Diego Plancente y Rodolfo Arruebarrena parecerían descartados por edad y nivel, mientras que Clemente Rodríguez deberá repetir en el fútbol español el juego que demostró en Boca si es que quiere tener una nueva oportunidad con la celeste y blanca. Javier Pinola, quien estuvo cerca de ir a la Copa América, esperará con ansias volver a ser llamado.
Si bien es cierto que en el fútbol argentino los nombres no abundan para estos dos puestos, cualquier jugador que logre destacarse de acá a octubre podría llegar a estar en la lista de convocados o hasta incluso entre los once que enfrentarán a Chile.